lunes, 19 de agosto de 2013

HOY LA HE VISTO..., LA HE VISTO Y ME HA MIRADO..., ¡HOY CREO EN DIOS! (Rima XVII Becker)


Cuando el Documento “Civilización del Amor, tarea y esperanza”[1] trata el tema del “análisis” de la realidad juvenil lo hace utilizando un lenguaje bastante iluminador para los educadores y formadores de jóvenes. Un lenguaje que lastimosamente ha quedado en el olvido al igual que el Documento mismo[2].

Rescatar ese lenguaje me mueve a escribir las siguientes líneas.

Otra forma hay de mirar.

En la sección segunda de la primera parte el Documento muy humildemente afirma:

Hoy día, ya no es posible hablar muy simplemente de “la juventud”, porque es casi imposible abarcar el amplísimo marco de realidad y las variadísimas situaciones en que viven los jóvenes, según sean sus raíces y orígenes étnicos, sus influencias culturales y las condiciones políticas, sociales y económicas en las que les toca vivir. Es necesario admitir que conocer y comprender el mundo juvenil no es tarea fácil.”[3]

Frente a esta primera imposibilidad de precisión sobre “qué debe entenderse por joven y juventud” continua diciendo:

“Muchas miradas se dirigen sobre ellos (los jóvenes). Aunque se trata de intentos parciales de acercamiento a su realidad, resultan útiles en la medida en que permiten hacer mayores delimitaciones y precisiones. En todo caso, se trata de miradas que no pretenden ser exhaustivas.”[4]

Con el término “miradas” los redactores del Documento parecen comprender a cabalidad sobre la “realidad-juvenil” aquello que Aristóteles mucho siglos antes había comprendido con respecto de los entes:

“Que la cosa primero se-muestra al observador (habla de sí misma), para luego poder ser de-mostrada a través del razonamiento lógico del observador.”

Con esto, “el Filósofo” quería indicar que nuestra concepción sobre las cosas no es el resultado de una mera fabulación del razonamiento; existe, por lo tanto, un momento intermedio  de silencio entre el mostrase y demostrar, en el cual la cosa observada afectando los sentidos de su observador se le hace presente -actual diría Aristóteles-,  para luego, en acto segundo,  con ayuda del silogismo, pueda ser explicada.

Nuestro Documento dirá lo mismo de forma más poética:

 Hay que educar la mirada para descubrir el don de Dios, experimentar su llamado a ser acogidos y amados y a encarnarse en el mundo de los jóvenes por la solidaridad humana y evangélica y por el contacto directo que permite ver, oír y emocionarse con sus vidas y con sus signos, con sus sensibilidades, con sus sentidos. Conocer la realidad de los jóvenes desde la perspectiva de Jesús exige establecer una relación de intimidad, dialogar e interactuar con ellos. Sólo así será posible” experimentar -“conocer”- sus necesidades reales y percibir sus verdaderos gozos y amarguras.”[5]

Por lo tanto, “Mirar” no significa ser mero espectador de un evento. Es ese momento de silencio respetuoso en el cual permito que la realidad “me afecte”, y solo desde esa afectación comprenderla mejor.

Para ti:
¿Qué significa educar la mirada?
¿Cuál será la importancia del "mirar" antes del juzgar?
¿Qué repercusión tiene esta forma de proceder en los ambientes educativos?

puedes ver el artículo completo aquí


[1] Documento del CELAM No. 161. Bogotá 2001
[2] Al momento de escribir estas líneas todavía no era público el nuevo documento nacido en la última reunión latinoamericana de PJ.
[3] Ibid pág 28
[4] ibídem
[5] Ibid pág 15

jueves, 15 de agosto de 2013

LA REVOLUCIÓN DE LO HUMANO


El tema no es teológico, pero la reflexión que podemos hacer de él sí.

La sociedad quizás no había sufrido tantos cambios y tan vertiginosos como los acontecidos desde finales del siglos XIX hasta la fecha. Las revoluciones francesa e industrial no tenían idea que estaban gestando verdaderamente un “nuevo orden mundial.” El posterior descubrimiento y desarrollo de las tecnologías de la Comunicación y la Información han contribuido sobremanera a ello. Estas TIC´s han revolucionado la manera de comprensión y relación de todos lo aspectos sociales. La educación no ha escapado a esta revolución.

La forma tradicional de comprensión de la educación: donde el acto didáctico se desarrolla en un espacio físico concreto (aula), con actores concretos (Docente-alumnos) y con mediaciones concretas (pizarras, cuadernos…) está paulatinamente mudando hacia lo que hoy los expertos han denominado con el anglicismo: e-learning.
El e-learning es definido como: el aprendizaje completamente virtualizado a través de los nuevos canales electrónicos (las nuevas redes de comunicación, en especial Internet), utilizando para ello herramientas o aplicaciones de hipertexto como soporte de los procesos de enseñanza-aprendizaje.[1]

En los últimos años esta modalidad educativa ha tomado mucho auge, y su utilización, sobre todo, en la Educación superior y en la capacitación empresarial va en aumento según afirma el Primer Barómetro de E-learning en Europa: “una cantidad cada vez mayor de empleados realizará cursos en e-Learning a partir de 2012... Y no solo hablamos de la empresa privada: universidades, Administración Pública, organizaciones y profesionales a nivel particular confían cada vez más en este tipo de formación”[2].

¿El nuevo modelo pedagógico del E-learning podrá dar ayudar a solucionar la asignatura pendiente de la educación: Humanizar. O se quedará solamente en brindar servicios y reducir costos para las grandes empresas?

He comenzado este escrito hablando de las revoluciones europeas de los siglos XVIII y XIX no por casualidad. Sino para subrayar cómo ellas contribuyeron a crear esta sociedad de clases, exclusiva (para algunos) y excluyente. El e-learning es en sí misma una nueva revolución: la revolución del siglo XXI: la Revolución de los Medios de Información y Comunicación. 

 ¿Podrá esta nueva revolución acercarnos al proyecto de humanización del hombre o continuará la líneas de sus antecesoras? 


lunes, 5 de agosto de 2013

JÓVENES Y POLÍTICA, ¿MIEDO AL COMPROMISO SOCIAL?

Aporte elaborado por Violeta Chichique.

¿Qué entendemos por política? El concepto es sumamente amplio y abarca todo tipo de dirección independiente en acción. << Política>> significa esfuerzos para compartir el poder, o esfuerzos para influir sobre la distribución del poder, ya sea entre estados o grupos dentro de un estado (Max Weber) Y en El Salvador, ¿cómo se entiende la política? ¿cómo se hace política en nuestro país? ¿qué interés hay al respecto?

Vivimos, pues, en una sociedad sumamente -y desgraciadamente- polarizada; estamos sesgados de injusticia y corrupción; la cultura se desvanece en el bombardeo de los medios de comunicación, en su lugar sólo nos van quedando anuncios publicitarios, estereotipos, tendencias deshumanizantes y consumismo; llevamos a cuestas un pasado que aún sufre las heridas de la guerra y la desigualdad; el despilfarro de recursos resulta indignante cuando se le compara con los niveles de inversión en educación y salud; nos rodean partidos políticos cuyos discursos se corroen cada vez más entre tantas falacias y actuaciones incoherentes con la realidad; aún no surgen líderes que brinden una propuesta certera y las próximas elecciones presidenciales no suscitan esperanza en la población.

Ante tal coyuntura, es evidente que los y las jóvenes presenten desinterés por la política, e incluso, aquellos que están dispuestos a ejercer un participación ciudadana son opacados por el nefasto prejuicio que coloca a la juventud nada más como "los que pegan panfletos", "los que traen las sillas", "los que sólo sirven para hacer bulla"... ¿Qué se debe hacer, entonces? ¿por qué no hay verdaderos espacios que incluyan a la juventud, si ésta se constituye como uno de los sectores mayoritarios en el país? ¿acaso no ejercen los jóvenes un papel protagónico en la cosntrucción de un presente y, consecuentemente, un futuro más digno? ¿de qué manera influye la política en la edificación del Reino de Dios? ¿cómo puede hacerse vida a través de la política? ¿cómo participa la juventud en la construcción de nuevos paradigmas sociales y económicos que erradiquen la exclusión? ¿cómo pueden ser los jóvenes voz de denuncia y construcción desde la política?

jueves, 25 de julio de 2013

EL KLEENEX, EL MICROONDAS Y LA ASPIRINA.

Aporte elaborado por Vladimir Valladares.

El kleenex, el microondas y la aspirina podrían ser tres símbolos del joven de hoy, de la persona que va configurando nuestra sociedad actual.

- El kleenex desechable, es el símbolo de la práctica del usar y tirar que caracteriza nuestra actitud actual en la sociedad de consumo. Nada dura, nada es estable, nada es para siempre. Usar y tirar... el matrimonio, la vida religiosa, todo es desechable...

- El microondas encarna el efecto de acción instantánea con resultado visible e inmediato que demandan los jóvenes de hoy. No hay tiempo para la espera, la formación y la madurez.

- La aspirina propicia la falta de tolerancia del dolor. El analgésico rápido, el remedio inmediato, la huída de todo lo que sea dolor y sufirmiento. El aprendizaje sin esfuerzo, el éxito sin compromisos...

Podríamos reflexionar, pensando en las siguinetes cuestiones:

1. ¿Quiénes pueden ser incluidos en las clasificaciones mencionadas?

2. ¿Existen otras clasificaciones que podamos comparar con algún ejemplo?

3. Comparar con tres símbolos evangélicos las categorías:
  • Kleenex con "toalla" (Jn 13, 1-15)
  • Microondas con "brasas" (Jn 21, 1-14)
  • Aspirina con "cruz" (Heb 5, 7-9; Jn 12, 20-33)

4. Saca tus propias consecuencias para la vida. ¿Qué opinas al respecto? Déjanos saber qué piensas!